Ana Paula Ordorica
Fue el sentimiento de frustración frente a la corrupción lo que la trajo hasta aquí y nada la detiene de seguir cumpliendo su meta: hacer periodismo de calidad y al alcance de todos, para hacer de México un mejor país. Ana Paula no canta los sacrificios de su labor porque vive comprometida con la palabra. A su voz se le ha sumado, otra voz y otra voz. Hoy ella es un colectivo vocal de denuncia y lucha, una de esas tantas mujeres a las que hay que seguir y acompañar si se quiere ser honorable y grande. Si alguien me preguntara qué le envidio a Ana Paula, mi respuesta sincera sería: 1.- Que a pesar de ser "working mom" nunca le ha faltado tiempo, atención y amor para sus hijos Patricio y Carla. 2.- Su colección de pantalones de piel y 3.- Su cuerpo de acero: porque sí, Ana P es una atleta incansable, que en cualquier faceta de su vida se ve espectacular. Además, siempre encuentra el tiempo para procurarse momentos felices al lado de su novio Andrés Sánchez Abbott, y es una amiga de esas pocas que no juzga y que te acompaña cuando necesitas y sin pedirlo; y por si esto fuera poco, le encanta el mitote. Qué fortuna la mía, y la de tantos, tenerla cerca ya sea en vivo y a todo color, o a través de la televisión, el radio o la tinta.