Seguro has tenido días en lo que te maquillas, pero sientes que falta algo o que no te termina de encantar. Ante este problema, TikTok llega con la solución ideal: el contrast makeup.
Hemos visto muchísimas tendencias ir y venir rápidamente durante los últimos años gracias a esta red social, pero esta llegó para quedarse, ya que está basada en la ciencia. ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo para lograr el maquillaje de tus sueños!
La tendencia del contrast makeup se basa en ajustar el maquillaje a los niveles de contraste natural del rostro, que se dividen en tres categorías: bajo, medio y alto.
Estos niveles dependen de los rasgos principales de cada persona, como el tono de la piel, el color de los ojos, el pelo y las cejas. A diferencia de otras técnicas, esta no se enfoca tanto en los colores utilizados, sino en la relación y el contraste que se establece entre el maquillaje y la piel. El objetivo es armonizar y resaltar los rasgos naturales, logrando un look equilibrado.
Se podría decir que la parte más complicada de esta tendencia es determinar tu tipo de contraste, pero no te preocupes, te decimos cómo hacerlo paso a paso. Primero que nada, es importante observar la diferencia entre los tonos de tus rasgos principales. Si tu piel, ojos, pelo y cejas tienen tonos similares y no hay un gran contraste entre ellos, es probable que tengas un contraste bajo. Por ejemplo, si tienes la piel clara, ojos claros y cabello rubio o castaño claro, tus rasgos se funden de manera sutil.
Por otro lado, eres de contraste medio cuando hay una diferencia moderada entre los tonos de tus rasgos. Es común en personas con piel clara u oliva y pelo castaño o negro, donde el color de los ojos también crea un contraste notable pero no demasiado fuerte.
Finalmente, si el contraste entre tus rasgos es marcado, tienes un contraste alto. Esto se da cuando el tono de la piel es claro y el pelo y las cejas son oscuros, o cuando los ojos tienen un color vibrante que resalta frente a la tez. Las personas con piel clara y cabello oscuro o con ojos muy brillantes suelen entrar en esta categoría.
Las personas con un contraste bajo deben optar por un maquillaje suave que complemente la sutileza de sus rasgos. Lo ideal es elegir tonos que se acerquen a los de su piel y pelo, como los nude, los beige o los tonos pastel. Para los ojos, sombras en tonos suaves como rosa claro, champaña o marrón claro funcionan bien, mientras que los labios pueden llevar un toque de brillo o un labial en tonos neutros. El objetivo es no crear grandes diferencias entre las zonas del rostro, manteniendo un look equilibrado y delicado.
Si tienes un contraste medio, puedes jugar con tonos un poco más intensos sin perder la armonía. Las sombras en tonos tierra, café oscuro o dorado son ideales para resaltar los ojos, mientras que los labios pueden llevar colores más definidos como los rojos suaves o rosa oscuro. Para equilibrar, un delineado sutil y una base que se fusione bien con tu piel realzarán tus rasgos sin hacerlos demasiado dramáticos. El equilibrio es clave: se busca resaltar los contrastes moderados de tu rostro, logrando un look elegante pero sin exagerar.
Las personas con un contraste alto pueden permitirse looks más dramáticos e intensos. Los colores intensos, como los negros, azules oscuros, o burdeos, son excelentes opciones para los ojos, combinados con delineados marcados que definan bien la mirada. Los labios en tonos fuertes, como los rojos intensos o los fucsias, complementarán el alto contraste natural de sus rasgos. Para la piel, una base que realce la luminosidad del rostro y un buen contour ayudarán a crear un look de impacto, manteniendo siempre el balance entre los elementos más contrastantes del maquillaje y los rasgos faciales.
