Un corrector bien aplicado puede ser la clave para un maquillaje perfecto. (Unsplash )
María José Barroeta
Si hay algo que no puede faltar en tu kit de belleza es un buen corrector. Si se aplica correctamente, éste puede ser tu mejor aliado para tapar ojeras, granitos o cualquier otra imperfección, así como para darle vida y luminosidad a la cara.
Sin embargo, es muy común cometer errores que hacen que el efecto sea contraproducente, dejando la cara opaca o marcando las líneas de expresión. Aquí comentamos los errores más comunes a la hora de aplicarlo, que pueden solucionarse más fácil de lo que imaginas, para que luzcas un makeup impecable.
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Los 5 errores más comunes al aplicar corrector
No estás usando el tono correcto
Como el propósito del corrector es darle luminosidad a la cara, éste debe ser ligeramente más claro que el de tu base para que cubra la oscuridad de las ojeras. Pero ¡ojo! no debe ser demasiado claro, sino uno o dos tonos más arriba.
En cuanto a los colores, te recomendamos que uses tonos ligeramente anaranjados si tienes ojeras cafés y tonos ligeramente rosados para ojeras violáceas. Para el resto de la cara, usa un tono idéntico al de tu base para que cuando tapes algún granito se difumine muy bien con el resto del maquillaje.
Todo está en la preparación de la piel y en usar los productos adecuados para ti. (Unsplash )
No preparas la piel antes de maquillarte
Hidratar la piel no sólo ayuda a mantenerla joven y sana, también es la clave para que el maquillaje se vea bien y dure todo el día. No necesariamente debes de aplicar primer, pero sí es esencial que uses una crema hidratante antes de usar tu corrector ya que esto evitará que se marque cualquier línea de expresión o aparezcan grumos. Esto no sólo aplica para el corrector, sino para cualquier otro paso de tu rutina.
No te dejes llevar por el beauty trend del 2016 en el que Kylie Jenner recomendó aplicar kilos de corrector en las ojeras. Es muy importante no sobrecargar la zona que estás trabajando para evitar un efecto cakey y plastoso que se irá agrietando con el paso del día. En vez de eso, te recomendamos ir de menos a más hasta lograr la cobertura que quieras y después difuminarlo con una esponja o con suaves toquecitos con los dedos hasta que logres un efecto natural.
Debes de preparar la piel, aplicar poco producto y más adelante sellarlo para obtener los mejores resultados. (Unsplash )
No lo estás sellando
Si quieres un acabado perfecto es necesario sellar el producto (esto aplica para cualquier producto líquido de maquillaje). No estamos hablando de un baking súper intenso. Con una brocha grande puedes usar un poco de polvo traslúcido y aplicarlo arriba del corrector. Esto hará que no brillemos en los lugares equivocados y nos ayudará a que el maquillaje se mantenga intacto durante todo el día.
Aplicas el corrector antes de la base
Aunque el underpainting es tendencia, aplica solo para el contorno, no para el corrector. En este caso, el orden de los factores sí altera el producto. Por eso, te recomendamos usar la base primero para darle uniformidad a la piel y que el corrector sólo sirva para afinar los últimos detalles, no dejes que haga todo el trabajo solo.
