¿Te imaginas poder eliminar grasa, celulitis y rejuvenecer tu piel sin tener que someterte a un procedimiento quirúrgico? Pues déjanos contarte que esto sí es posible gracias a la mesoterapia.
Si nunca habías escuchado este término y no sabes lo que es, no hay por qué preocuparse, nosotros te contamos todo lo que necesitas saber sobre este tratamiento.
La mesoterapia es un tratamiento no quirúrgico que se utiliza con el propósito de tratar diversas condiciones estéticas y médicas para mejorar la apariencia de la piel. Existen dos tipos:
Esta se realiza en la cara con el objetivo de mejorar la apariencia de las arrugas, revitalizar el rostro, desaparecer cicatrices y prevenir el envejecimiento.
La función principal de este tipo de mesoterapia es eliminar la celulitis y eliminar la grasa acumulada en zonas del cuerpo en donde es muy difícil quemarla.
Este procedimiento se aplica a través de la infiltración de sustancias como aminoácidos, vitaminas, minerales y medicamentos debajo del tejido de la piel donde se quiera trabajar.
Uno de los beneficios más grandes de la mesoterapia es que es capaz de destruir grasa localizada y eliminar la celulitis que pueda haber y con ello, controlar el sobrepeso. Los cambios en la piel con este procedimiento son bastante buenos, queda mucho más suave y firme.
La mesoterapia favorece el drenaje linfático y la microcirculación sanguínea, esto hace que las piernas no se inflamen y puedas prevenir varices en un futuro.
La mesoterapia facial tiene múltiples beneficios para tu cara: incrementa la hidratación e uniformidad de la piel, aporta luminosidad, activa la microcirculación y corrige arrugas dando un efecto rejuvenecedor.
Una gran ventaja de este procedimiento es que no duele, las infiltraciones se realizan con agujas muy delicadas y en muchos casos se coloca una pomada anestésica en caso de que uno sea intolerante a las inyecciones. Además, las sesiones son muy cortas.
Se puede aplicar mesoterapia en casi cualquier lugar del cuerpo. Los lugares más frecuentes suelen ser el abdomen, glúteos, caderas, muslos y la cara.
Esta respuesta depende mucho del área que quieres tratar, generalmente este tratamiento puede ser de 10 a 15 sesiones para ver excelentes resultados.
Este procedimiento es ideal para personas que se encuentren en buen estado de salud, así que si tienes alguna de las siguientes características, no es el procedimiento para tí: diabetes, cáncer, enfermedades cardíacas o en la piel, embarazada o en periodo de lactancia. Recuerda hacerlo siempre bajo la supervisión de un experto.
Si quieres probar la magia de la mesoterapia, hazlo, te encantarán los resultados, sin embargo, es importante que consultes a un especialista en el tema.
