Si piensas que tu perfil y tu cara en general podría mejorar su apariencia con un retoque en la nariz, pero tal vez el miedo al quirófano, el dolor y la recuperación pueden ser algunos de los factores que podrían detenerte para hacerte una rinoplastía.
Sin embargo, existen otros procedimientos mucho menos invasivos con los que podrías obtener los mismos resultados, pero eso sí, no serán permanentes.
Nos referimos a la rinomodelación con ácido hialurónico, un componente que producimos de forma natural, pero que con el paso del tiempo el cuerpo disminuye su producción.
Al respecto platicamos con el Dr. José Romeo, quien es especialista en cirugía plástica estética y reconstructiva, además de ser miembro de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva, así como de la American Society of Plastic Surgeons.
La rinomodelación con ácido hialurónico es un procedimiento a través del cual se pueden cambiar ciertos aspectos específicos de la nariz; es decir, se puede respingar y dejarse perfectamente recta, pero no se puede quitar lo ancho o tener una punta muy fina, nos cuenta el Dr. Romeo.
Actualmente existen una mezcla de tratamientos con ácido hialurónico y toxina botulínica con los que se pueden afinar el ancho de nariz, de manera que el músculo de los costados de la nariz se paralicen y ya no se vea tan abiertas.
"No hay una edad establecida para hacer este procedimiento, aunque es importante que el desarrollo del cráneo esté completo, en el caso de las mujeres, podría realizarse a partir de los 17 años, mientras que en el caso de los hombres, lo ideal es esperar después de los 18, 19 años", recomienda el experto.
La rinomodelación con ácido hialurónico consiste en hacer pequeñas infiltraciones de ácido hialurónico en el puente nasal y la punta de la nariz. La técnica de inyección varía de médico a médico aunque es importante que te cerciores de que el profesional está calificado y certificado para llevar a cabo el procedimiento que no dura más de 20 minutos.
Algunas de las molestias que puedes sentir después del procedimiento son: ardor, dolor, inflamación, rojez en el área , que en máximo dos días desaparecerán.
Es importante que en las horas posteriores, tomes suficiente agua para que el ácido hialurónico logre el volumen deseado, así como evitar usar lentes de armazón por unos días y sobre todo no dormir boca abajo en la primera noche posterior al procedimiento.
Si ya te decidiste a hacer una rinomodelación con ácido hialurónico, una de las recomendaciones más importantes que el Dr. Romeo nos da, es que lo hagas en un lugar que cuente con las certificaciones y que el profesional tenga entrenamiento para llevar a cabo el procedimiento, debido a que de lo contrario podría tener complicaciones graves.
