Siempre me ha gustado pasar tiempo bajo el sol, intentado lograr el bronceado perfecto, pero siempre cuidando mi piel. Para conseguirlo no basta con tirarse por horas al y esperar lo mejor. Lograr ese color dorado o anaranjado es un proceso que requiere preparación y también mantenimiento para asegurar los resultados deseados sin dañar la piel en el proceso.
Son muchos los factores que debemos considerar antes de exponernos al sol: desde las horas en las que te asoleas, el tiempo y hasta el traje de baño que usas. El sol, más allá de sus efectos estéticos, puede ser perjudicial para la piel, por eso hemos reunido los mejores consejos para decirte cómo broncerte fácil y sin dañar tu piel.