Christina tenía el ejemplo perfecto en casa, su bisabuelo, abuelo y su papá, quienes sacaron adelante a su familia a través de su propio negocio, Interceramic, que se volvió muy exitoso; mientras le daba forma a su idea, el patriarca de su familia murió y ella, en su honor, decidió nombrar su empresa con el mote que él le decía de cariño: Pildora.
"Fue muy retador, pero salió todo bien, realmente la tienda abarca marcas sustentables, de bienestar, belleza y moda, curamos este espacio con brands que están enfocadas en un consciente y holístico estilo de vida. Todas tiene la misión de hacer bien al planeta, al cuerpo y la salud de las personas", contó Almeida, en entrevista con Quién.
Christina está cambiando la narrativa en como la gente puede consumir, bajo una clara filosofía: "No queríamos sólo vender productos, sino construir una comunidad de personas empoderadas, en la que nos podamos educar en sustentabilidad y generar una consciencia en causas sociales.
"Construir una plataforma en la que todos apliquen estos valores en su vida diaria y la meta máxima es no seguir poniendo en riesgo al planeta", abundó. Almeida quiso también decirle a quienes quieren emprender, que no será un camino fácil, pero les compartió el camino que ella abrazó.
"El empoderamiento para mí consta de tres pasos, el primero es establecer una relación contigo misma, embarcarte en ese viaje de amor personal, el segundo paso es saber cuál es mi relación con otros seres humanos, básicamente cómo trato a los demás incluidos amigos y familia, y a los extraños, y el tres es cómo trato al planeta y a lo que nos rodea.
"Creo que si no nos amamos a nosotros mismos, no podemos hacer una diferencia para el planeta, así que es muy importante primero descubrir este amor propio, antes de iniciar cualquier negocio, porque hay muchas cosas en los medios y la cultura que nos hacen caer, así que hay que trabajar en la autoestima", agregó Christina.