Cuando éramos pequeñas solíamos imitar casi todo lo que mamá hacía, una de esas cosas era tratar de recrear su beauty routine, apropiarnos de sus labiales, sombras y perfumes para hacer nuestro mayor esfuerzo en lograr algo como ella, aunque nunca haya resultado así.
El perfume ha estado en nuestras vidas desde que éramos pequeñas, cuando mamá nos rociaba del suyo, el primer propio que compartimos con nuestra mejor amiga y -con el paso del tiempo- los que lograron quedarse con nosotros y colocarse en la cima de la lista de nuestros preferidos.
Nuestras fragancias favoritas están a cargo de las mansión que han dedicado su vida a explorar ingredientes, estudiar procesos que les permitan realizar colecciones icónicas y que prevalezcan a través del tiempo. Guerlain es una de esas casas, en 1994 presentó su colección Aqua Allegoria, desde entonces, cada fragancia que se une a esta línea hace un statement por los ingredientes que explora y el viaje para los sentidos que cada uno crea.