Aunque podría sonar un poco temprano para comenzar a usarlo en la rutina de belleza, el Dr. Goldzweig recomienda hacerlo desde los 15 años. Pero es a partir de los 30 cuando se comienzan a notar (más) las líneas de expresión, así que ése es el momento de incluirlo sí o sí en tu rutina y continuar su uso... ¡por la eternidad!
Los múltiples beneficios que el suero puede aportarnos no es lo único por lo que lo amamos: su aplicación también es muy fácil y nada tardada. La mayoría de ellos trae un gotero que es la cantidad recomendada para usar, basta con dejar caer las gotas sobre tu frente, mejillas y barbilla para después llevarlo a todo tu rostro de adentro hacia afuera con movimientos circulares y alisantes. El restante puedes aplicarlo en tu cuello y escote, pues en esta parte también se llega a perder tensión, y aparecen manchas y arrugas.
Ingrediente activo según tu edad
20 a 30 años:
A esta edad la piel no ha sufrido cambios notables. Se recomienda usar uno que contenga ácido hialurónico.
30 a 40 años:
Lo ideal es que la vitamina C no falte en ninguno, pero a esta edad debe ser el primer ingrediente activo.
Más de 40 años:
Las arrugas y pérdida de tensión son más notorias. Opta por un suero con retinol que beneficie el proceso de renovación celular.
El suero es un must en nuestra skincare routine, pero al igual que todo, si quieres ver resultados debes de ser constante con su uso, así que entre más tiempo lo utilices, ¡mejores resultados tendrás!