Los delineadores existen casi desde siempre, pero hoy en día hay demasiadas maneras de utilizarlos, tanto, que es fácil confundirse. El primer look que puedes aplicar es utilizar un eyeliner en lápiz; para enmarcar los ojos ponlo en forma de cateye, sin preocuparte tanto por la precisión, después toma una brocha pequeña pero algo fluffy para difuminarlo, esto le dará un look sexy y despreocupado a las llamadas ventanas del alma.
El segundo look es un clásico que nunca morirá: el cateye bien definido. Para tener más control te recomendamos utilizar un delineador líquido. El estilo de este es más grueso, lo que te da más libertad de emparejar los dos lados sin miedo a exagerar en el tamaño, eso sí, si te pasas puedes probar un maquillaje al estilo Trixie Mattel, sacando tu lado drag race.