3. El pelo quemado
Ya sea por usar demasiado herramientas de calor, por la mala calidad del tiene, decoloración y uso de químicos, el pelo quemado es una verdadera pesadilla, aunque la realidad es que es uno de los problemas más fáciles de resolver.
La primera es cortar lo maltratado, que casi siempre son las puntas, así que no tengas miedo, no te quedarás con el pelo corto. El brazilian blowout es uno de los remedios más efectivos, pues hidrata al máximo la fibra capilar y además lo deja sin frizz y súper manejable.
Las mascarillas ricas en proteínas y aceites como argán, coco y karite mejoran el aspecto y poco a poco van quitando lo maltratado. Taninoplastia es el tratamiento hecho de taninos naturales que protegen e hidratan el pelo durante seis meses.
4. Sin volumen
Si este es tu caso la opción perfecta sería optar por un look más corto. No hay ningún tratamiento que ayude a engrosar el cuero cabelludo ya que esto al igual que la cantidad viene de nacimiento pero sí existen productos que te ayudan a darle volumen y que el resultado es súper bueno. ¿Uno de nuestros favoritos? El Style Lab Amp Instant Texture Volumizer de Living Proof el cual ayuda a crear espacio y fricción para dar más volumen.
5. Pelo opaco
Con el paso del tiempo y si hay poco cuidado el cuero cabelludo puede ir perdiendo brillo. La forma más efectiva para recuperarlo es con masacrillas hidratantes o aceites con karité, proetínas de seda, aceites de coco, argán o aguacate. Estos ingredientes además de proteger tu melena le aportarán luz.
Y tú, ¿cuántos problemas capilares tienes?