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¿Piel seca en invierno?

Las temperaturas frías son el enemigo mortal de la piel. Si estás notando resequedad y falta de vida en la cara, es probable que tengas que hacer unos cambios en tu rutina. Te decimos qué hacer.
mié 16 noviembre 2016 12:57 PM
Evita que el frío reseque tu piel.
Evita que el frío reseque tu piel. Evita que el frío reseque tu piel.

¿Has notado que tu piel está cambiando con el frío? La razón es sencilla: el frío le hace daño a la piel. Además de la temperatura, los niveles de humedad también bajan, resultando en una piel reseca y sin vida.
Para que le devuelvas la humectación ideal a tu piel y que esté igual de sana que el resto del año, te decimos 5 cosas que debes hacer este invierno.

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1. Adiós al agua caliente
Uno de los peores enemigos para la piel reseca, especialmente en el invierno, es el agua caliente. Sí, estamos conscientes que después de haber pasado un día frío en la calle, lo que más se antoja es llegar a casa a darse un baño caliente. Lo que tal vez no sepas es que bañarse en esta temporada con agua muy caliente ayuda a que los aceites buenos de la piel se eliminen y, por lo tanto, la piel se reseque. La pérdida de humectación en la piel, en muchas ocasiones, es causada por baños con agua hirviendo. Aunque te cueste trabajo, en esta temporada de frío te recomendamos lavarte la cara con agua tibia. De esta manera ayudarás a que tu piel conserve los aceites necesarios para mantenerla sana.

Usa crema con base de aceite durante el invierno.
Usa crema con base de aceite durante el invierno.

2. Crema y más crema
A pesar de que es importante aplicar crema humectante todos los días, durante los meses de invierno es todavía más. Después de lavarte la cara o bañarte, procura aplicar la crema de manera inmediata. De esta manera estarás asegurándote que la crema selle la humectación a la piel. También puedes optar por aplicar aceites en vez de cremas. Una cosa que debes tener en mente es que especialmente en las temporadas de frío, es importante usar cremas humectantes con base de aceite y no de alcohol. ¿Por qué? Las cremas con base de aceite penetrarán de mejor manera la piel, ayudando a eliminar la resequedad y mantener la piel humectada durante el invierno.

3. Consigue un humidificador para tu cuarto
¿Sabías que los sistemas de aire caliente ayudan a secar la piel? Tal vez no cuentes con calefacción en tu casa, pero seguramente lo usas si estás en el coche. Además de que durante los meses de frío el ambiente se seca y no hay la misma cantidad de humedad en el cuarto, los sistemas de calefacción también ayudan a resecar más el ambiente. Te recomendamos comprar un humidificador y ponerlo en tu cuarto. Durante la noche, cuando duermes, el humidificador le regresará la humectación a tu cuarto, ayudando a que la piel se reseque menos.

4. No olvides tomar agua
Ya conoces la importancia de tomar agua, pero tomar agua durante los meses de invierno es súper importante. Además, durante el verano tomamos más agua pues necesitamos refrescarnos y, durante el invierno, optamos por bebidas calientes y no tan hidratantes. Recuerda que el cuerpo necesita hidratarse de adentro hacia afuera. Aunque es súper importante usar crema, es también indispensable tomar agua e hidratar el cuerpo desde adentro. Si te cuesta trabajo tomar agua durante la temporada de frío, te recomendamos tomar agua tibia con limón. Además de ser excelente para el metabolismo, será una buena manera de hidratarte.

Consume alimentos altos en agua, vitamina C y omega 3.
Consume alimentos altos en agua, vitamina C y omega 3.

5. Cuida lo que comes
Como ya mencionamos, ayudar a hidratar a el cuerpo de adentro hacia afuera es indispensable para tener una piel humectada. Durante la época de frío, es importante tener una dieta con frutas y verduras que contengan mucha agua para hidratar la piel. Opta por comer sandía, melón, naranjas, kiwi, apio, jitomate, pepino y zanahorias. También es importante que incluyas en tu dieta alimentos con vitamina C para evitar las enfermedades y con omega 3. El omega 3 ayuda a que las células se mantengan lubricadas, sanas y rejuvenecidas. Para incrementar la ingesta de omega 3, te recomendamos incluir salmón, aceite de oliva, frijoles, nueces y calabaza a tu dieta.

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