Brigitte Macron 'obligó' a Jill Biden a retomar una antigua tradición de moda
La primera dama francesa hizo que la doctora reviviera una costumbre de siempre en la Casa Blanca, con tal de salir bien librada de su encuentro en una cena de Estado.
Jill Biden se enfrentó a un "problema" con la visita de la pareja presidencial francesa a EE.UU. La primera dama Brigitte Macron es un verdadero ícono de la moda y favorita de la prensa, por lo que la doctora tuvo que sacar "toda la artillería" fashion durante su encuentro en una cena de Estado en la Casa Blanca.
Al final Jill estuvo a la altura de las circunstancias. Cuando ella y el presidente Biden recibieron al presidente francés Emmanuel Macron y a Brigitte en la primera cena de Estado de la administración, saludaron a sus invitados en el aire frío de diciembre en los escalones de la Casa Blanca.
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La pedrería del vestido columna de manga larga, azul marino y con los hombros descubiertos de la primera dama brillaron entre los espacios de las aplicaciones florales que envolvían su silueta. Biden logró usar ese elemento de flores que la distingue incluso en los eventos presidenciales más formales y deslumbró.
Pero el statement de Jill también se pudo ver en su elección de diseñador para su cena de Estado inaugural como primera dama. Su Oscar de la Renta también dijo mucho sobre su relación no sólo con la moda sino también con la tradición.
Jill Biden optó por revivir una antigua tradición en estilismo.(Jacovides Dominique/Pool/ABACA/Shutterstock)
Duelos de estilismo
Durante la mayor parte de los últimos días, tal vez como era de esperar, la sensibilidad de Brigitte por la moda cautivó a los espectadores. Cuando llegó el martes por la noche y desembarcó en la Base Conjunta Andrews, una revista francesa elogió su conjunto beige monocromático de aspecto lujoso.
Calificó su tono crema bajo las luces de la pista como "luminoso" y "francamente elegante". Para visitar la tumba de Pierre Charles L'Enfant en el Cementerio Nacional de Arlington el miércoles, Macron vistió toda de negro: tradicional con un abrigo largo cruzado y una blusa de cuello alto, y glamorosa con tacones negros gruesos y pantalón pitillo.
Brigitte Macron a su llegada a Estados Unidos.(Ludovic Marin/AFP)
Biden, por su parte, se mantuvo en su zona de confort durante la mayor parte de esta visita: saludó a los Macron en la Casa Blanca el jueves durante el día con un abrigo de cuello alto, tacones y guantes, todo en el mismo tono rosado, tal como lo hizo para el Día de la Inauguración en 2021.
Para una cena privada con los franceses la noche anterior, usó un abrigo de lana oscuro sobre un modesto vestido hasta la rodilla. Al elegir usar un Oscar de la Renta personalizado para la cena de Estado, Jill asumió algunos riesgos gratificantes y también transmitió un compromiso con las costumbres y convenciones más queridas.
Jill Biden y Brigitte Macron tuvieron varios duelos de estilo.(Shutterstock)
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La firma Oscar de la Renta, que ahora está bajo el liderazgo creativo de los diseñadores Fernando García y Laura Kim, hizo el vestido a medida para Biden. De la Renta fue llamado el primer diseñador no oficial de los Estados Unidos por la cantidad de primeras damas que han usado su trabajo. Jacqueline Kennedy en la década de 1960.
Nancy Reagan, Hillary Clinton y Laura Bush siguieron sus pasos. Oscar una vez criticó a Michelle Obama por llevar a un diseñador europeo (Sarah Burton de Alexander McQueen) a una cena de estado en China en 2011: "Tengo entendido es que la visita fue para promover el comercio entre EE. UU. y China, ¿por qué usas ropa europea?".
Algunos supusieron que la declaración se debía en parte a un sentimiento de desprecio: Obama, hasta ese momento, nunca había usado sus diseños. Michelle, finalmente, bien entrado en su segundo mandato como primera dama, usó un vestido de cóctel de Oscar, sólo unas semanas antes de su muerte.
Al igual que Obama, Melania Trump lo usó con moderación. Las primeras damas, en otras palabras, solían usarlo en ocasiones presidenciales formales todo el tiempo. El vestido brillante de Biden el jueves por la noche, entonces no fue sólo una elegante elección de moda, sino un paso audaz hacia la restauración de una preciada relación.
La doctora Jill Biden se anotó un gran acierto.(Kent Nishimura/Los Angeles Times via Getty Images)
