Fue el 8 de octubre pasado cuando Rafael Nadal y su esposa, María Francisca (Xisca) Perelló , debutaron como papás tras el nacimiento de su bebé Rafael, pero fue hasta una semana después cuando el tenista lo confirmó y agradeció las muestras de cariño por parte de sus seguidores.
Aunque la llegada de un hijo siempre es motivo de celebración y bendiciones, la estrella del tenis recién recordó que el embarazo de su pareja no fue del todo perfecto.
Nadal está en Buenos Aires, Argentina como parte de una gira que contempla países como Chile, Brasil, Colombia, Ecuador y México. En conferencia de prensa junto a su colega, el tenista noruego Casper Ruud, con quien se enfrenta este 23 de noviembre en la cancha en un juego de exhibición, habló acerca de la situación personal por la que atraviesa.
“Fui papá hace relativamente poco, no sé cómo me va a afectar en el calendario de 2023... Hay que adaptarse”, comentó cuando se refirió a sus próximos planes.
“He pasado momentos difíciles físicos y momentos complicados en el embarazo de mi esposa. Me hicieron falta partidos en estos últimos meses”, añadió para luego prometer que está dispuesto a recuperarse.
“Con ganas de trabajar, de ponerme en forma. Mi primer objetivo es pasar más tiempo en el circuito real, voy a trabajar de la manera que creamos que sea conveniente. Con la confianza y la ilusión de seguir adelante”, agregó.
Cabe recordar que a fines de septiembre pasado, un mes antes de que su hijo Rafa naciera, el español reveló que pasaba por días muy duros.
“No estoy bien. Han sido semanas difíciles, pocas horas de dormir, un poquito de estrés en general. Situaciones un poco más complicadas de lo habitual en casa”, reconocía en aquel entonces para luego decir que había tenido que lidiar con una presión diferente a la que estaba acostumbrado en lo profesional.
El hijo de Rafael Nadal y Xisca Perelló nació en el centro hospitalario de Palma de Mallorca. La noticia del embarazo salió a la luz en junio, luego de que hubo rumores durante semanas de que la pareja daría la bienvenida a su primogénito.
Luego de las complicaciones durante el embarazo, Rafael tuvo que acortar su participación en la Laver Cup, en Londres, Inglaterra, debido a que el parto podría adelantarse.
