El estadio de Saint-Denis vivió el sábado 28 de mayo una pesadilla sin precedentes desde su inauguración en 1998.
El silbatazo inicial de la final de la Champions League que disputaron el Liverpool y el Real Madrid tuvo que retrasarse 15 minutos debido a una serie de problemas de seguridad que, sin duda, sobrepasaron a la organización.
Pocos minutos después de la hora pactada para el inicio del partido, empezaron a circular en redes sociales imágenes que mostraban el caos que se desató en las inmediaciones del Stade de France. Usuarios de redes mostraron los forcejeos, peleas, intentos de robo y gente tratando de colarse al estadio sin tener boleto.
Esos incidentes llevaron a la policía a actuar con contundencia y cierta arbitrariedad, hasta el punto de que finalmente los golpes de macana y el uso de gases lacrimógenos acabaron afectando a delincuentes y espectadores inocentes por igual.
Las familias de los futbolistas que, en esos momentos, calentaban en el terreno de juego sin todavía explicarse qué estaba ocurriendo exactamente en el exterior, también sufrieron en carne propia la mezcla de vandalismo y brutalidad policial que se concentró en los instantes previos al juego entre el Liverpool y el Real Madrid.
Júlia Vigas, esposa de Thiago Alcántara, jugador del Liverpool, recurrió a sus redes sociales para narrar de primera mano su terrible experiencia.
"Fuimos amenazados constantemente por bandas de ladrones que intentaban asaltarnos y se colaban en el estadio sin entrada", aseguró Júlia en su cuenta de Instagram, antes de criticar abiertamente la improvisada y torpe actuación policial. La policía arrojó gases lacrimógenos a las familias y los aficionados, y algunos de ellos también fueron golpeados. Todos ellos eran personas inocentes", afirmó la mujer sobre las acciones que calificó como "falta de organización y seguridad".
"Tuvimos que salir escoltados por nuestra seguridad. Pedimos responsabilidad, esto pudo haber sido mucho peor", señaló la esposa de Thiago Alcántara.
Asimismo, la actriz Sara Sálamo, pareja del delantero de Real Madrid Isco Alarcón, hizo referencia al miedo que pasó en el que ya es considerado por muchas voces como el evento más problemático y conflictivo del que ha sido testigo el mundo del deporte en tiempos recientes.
"Nervios, ilusión, miedo y extenuación", fueron las palabras con las que Sara describió la suma de sentimientos encontrado que vivieron la actriz y sus hijos, quienes posteriormente bajaron a la cancha del estadio en Saint-Denis para festejar con Isco Alarcón el triunfo del Real Madrid, quien se llevó a casa “La orejona”, al derrotar al Liverpool por la mínima diferencia de un gol que marcó Vinicius Júnior durante el segundo tiempo del encuentro.
