Es el penúltimo día de actividades en la Feria Internacional del Libro. El salón Enrique González Martínez tiene el cupo lleno. Hay una fila de lectores que esperan a que un poco de espacio se habilite. Los organizadores colocan nuevas filas de sillas que pronto serán ocupadas por personas que llevan entre las manos el reciente libro de Anabel Hernández, Emma y otras señoras del narco.
Anabel Hernández revela que está investigando a más famosas ligadas al narco
Después de unos minutos de espera, la periodista entra al foro. Los asistentes aplauden. Con cierta fuerza, coloca un ejemplar de su libro y una carpeta sobre la mesa desde donde hablará del trabajo de investigación y de su método de obtención de datos. Antes de tomar asiento, saca de una bolsa una pila de documentos que, después explicará, es sólo uno de los más de cincuenta tomos de documentos judiciales que sustentan la publicación.
Durante la presentación, la periodista hace un recorrido por las investigaciones periodísticas que ha realizado a lo largo de los últimos 20 años y que, dice, ha puesto a disposición de la opinión pública en los libros Los Señores del narco, La verdadera noche de Iguala y El traidor.
“Hay mujeres que buscan el cambio y hay mujeres que se someten a las reglas machistas [...] Hay mujeres que se han prestado a ser cómplices de delitos terribles de la humanidad”, dijo la autora sobre la participación de algunas mujeres en la historia, esposas de dictadores y líderes políticos que cometieron delitos. “Este movimiento del Me Too tiene que estar acompañado de una autocrítica de las mujeres de nuestro rol de cambio o de complicidad”.
Después de una ligera pausa, Anabel Hernández aseguró que la lista con nombres de mujeres del mundo del espectáculo relacionadas con el narco aún es amplia. Sin embargo, aclaró que no se encuentran en este libro porque las investigaciones aún no terminan. “Mi responsabilidad me obliga a revelar esos nombres cuando ya haya terminado la investigación''.
También compartió con sus lectores que hubo información que prefirió no incluir en la publicación. “Llegaba a un punto de intimidad y de revelaciones de intimidad de algunas de las personas que menciono en el libro, que me pareció que no eran de interés periodístico. Esta es la ética con la que hice el libro”.
Finalmente la periodista hizo un llamado a las mujeres que, directa o indirectamente, tienen algún vínculo con el narcotráfico a romper el pacto de silencio. “Que nos cuenten realmente su sufrimiento, que nos platiquen cómo llegaron ahí, cuáles fueron las motivaciones y ayudarlas a salir de ahí. Este no es un libro para condenar a nadie, esto no es la santa inquisición, este libro pienso que puede ser una oportunidad para las que han estado, las que están y para que las que, desgraciadamente, pueden llegar a caer en esto, para que rompan el silencio, para que rompan el sistema patriarcal, para que rompan ese pacto criminal”.
Compartimos ahora la segunda parte de una entrevista de Quién con la periodista.
¿Esperarías que, tras la publicación del libro, el gobierno se tome más en serio la participación de las mujeres?
Es la expectativa de este libro, que genere ante todo información a la ciudadanía, que la ciudadanía tenga acceso a la información que por muchos años ha estado escondida que en algunos años ha estado circulando como especulaciones pero es la primera vez que esta información se pone así, de manera sólida, con pruebas sólidas, con testimonios directos de los hechos ahí sobre la mesa. Este libro tiene la función de informar a la sociedad en su derecho humano de estar informado. Segundo, de generar un debate nacional, porque los debates siempre son útiles para reflexionar qué somos y qué queremos ser como sociedad y me parece que esto el libro lo está cumpliendo.
En tercer lugar es, judicialmente, replantearnos qué debemos hacer con estas mujeres. A mí me llama la atención una cosa, Emma Coronel aunque ya estaba completamente identificado su papel criminal en el cartel Sinaloa como mensajera del marido, ayudando a fugarse, lavando dinero que fue lo que se hizo público en el 2018 y 2019 en Estados Unidos, el gobierno de México no la molestó ni con el pétalo de una rosa. No la investigó, la dejó totalmente libre. Era intocable. ¿Quién la investiga y quién la detiene?: el gobierno de Estados Unidos. Pero no ha sido así con todas las mujeres del narco, tenemos a la esposa del Mencho (Rosalinda González Valencia) que el gobierno la ha detenido dos veces, por hechos cometidos exactamente con la misma tipología que diversas mujeres que yo narro en el libro. ¿Por qué a la esposa del Mencho sí y a las otras no? Es una pregunta que hay que formularse. Lo ideal sería que el gobierno realmente pudiera identificar su rol, realmente importante en estas estructuras criminales y encontrar una manera de, o darles una salida a estas mujeres de que confiesen, de que digan, de que hablen, de que revelen sus secretos; o intentar atacar a través del sistema judicial poniendo penas, sanciones a estas mujeres por prestarse a este rol.
Cómo fue darle el punto final al libro cuando este fenómeno se mueve. Llama la atención que el libro termine en la audiencia de Emma Coronel que ocurrió hace un par de días.
Era predecible. Yo tuve acceso y están citados ahí los documentos de todo el expediente judicial de Emma Coronel. Lo que sucedió no es una sorpresa, cualquiera que haya leído el expediente y ahí yo narro todos los documentos en los que me baso, era absolutamente ya una cosa dicha, ya era una cosa predecible. El libro termina en una cosa predecible, no teníamos por qué esperar si sabía yo cómo iba a terminar la situación.
En el libro explicas el acercamiento del star system mexicano y el sistema criminal.
Como también se entiende el sistema criminal político mexicano que también está aquí. Es increíble que nadie hable, por ejemplo, o hasta ahora no se explore suficientemente de las fiestas en las que acudía Enrique Peña Nieto o de cómo el senador Felix Salgado Macedonio entra y sale de la casa de la Barbie en Acapulco.
En el prólogo del libro explicas que este es un primer paso, ¿qué viene?
Viene este debate, viene este análisis, viene preguntarnos qué somos como sociedad. Viene un fuera máscaras, un vernos realmente como somos. Por qué este libro evidentemente habla sobre este sistema criminal, pero mucho de las cosas nocivas que ocurren en este libro que narro a través de testimonios y documentos judiciales, de México y Estados Unidos, habla por desgracia de un sistema machista patriarcal, abusivo que no solo existe en los grupos criminales, existe en diferentes niveles de la sociedad en México. Creo que las mujeres que lean este libro, reflexionan: alguna vez me pasó esto a mí, alguna vez yo viví una situación así. Creo que este libro habla también de una cuestión universal que es lo que está en México que es esta cultura machista y es una invitación a las mujeres a romper este silencio a romper la omertá (código de honor), no solo la omertá del crimen organizado, a romper la omertá de este mundo machista en el que vivimos. Creo que en particular las mujeres del mundo del espectáculo deberían hacer una especie de Me too a la mexicana, de empezar a hablar cómo funcionan estos circuitos dentro de los medios de cultura popular.
¿Por qué crees, ahora que lo mencionas, que no se ha dado un movimiento Me too en México como si se ha dado en otras industrias?
Creo que hay una serie de intereses y creo que este libro quisiera romper con esos intereses.
Ves el video que Galilea Montijo publicó recientemente y qué piensas…
No voy a hablar de eso. No voy a juzgar. No voy a hablar de eso. Lo que voy a comentar es esto: tienen que leer el libro completo.
Te comentaba en el sentido de que en el video comenta su empresa que es Televisa que ha sido su empresa de todo este tiempo y si crees que detrás de este tipo de reacción se encuentren esas estructuras empresariales de medios en nuestro país que durante mucho tiempo fueron un monopolio.
Yo hasta este momento no tengo una solución a esa hipótesis, a esa pregunta de quiénes llevan a estas mujeres a esos lugares, cómo estos narcotraficantes las contactan. Es una línea de investigación que está todavía en marcha.
¿Alguien de los aquí mencionados se ha acercado contigo buscando alguna especie de diálogo, de aclaración?
Lo que te puedo decir hasta este momento, ahorita que estamos hablando, es que aunque se han dicho muchas cosas, hasta este momento no hay ninguna solicitud ni demanda judicial. Ninguna. Cero. Todo lo demás que se diga son expresiones que cada uno tiene derecho a decir en materia de libertad de expresión, pero ya en los hechos sobre la mesa, no hay nada. En segundo lugar no, no se han puesto en comunicación conmigo. Aquí en la solapa del libro hago un señalamiento, cualquier información que aporte datos a esta investigación favor de contactar emma.señorasdelnarco@gmail.com. Esta es mi convocatoria y sí, sí espero escuchar las voces de muchas mujeres, no sólo de las que hable sino de tantas otras.