Pamela Cortés-Roemer , esposa de Andrés Roemer, rompió el silencio. Por primera vez desde el 16 de febrero, la periodista recurrió a sus redes sociales para expresar varios puntos: que las denuncias contra su esposo han sido dolorosas, que se siente amenazada y que condena los ataques perpetrados contra la casa de su marido, ocurrido el lunes 8 de marzo la colonia Roma.
"Me siento amenazada": esposa de Andrés Roemer rompe el silencio
Pamela informó en Twitter e Instagram que durante el 8 de marzo un grupo de mujeres lanzó gas a la casa de su marido y que incluso se intentó quemar la construcción cuando había personas al interior del inmueble.
“El día de ayer, grupos de mujeres agredieron la casa de mi esposo, intentaron allanarla por la fuerza y lanzaron gas para intentar prenderle fuego con habitantes en el interior", denunció en un hilo de tuits.
El día de ayer, grupos de mujeres agredieron la casa de mi esposo, intentaron allanarla por la fuerza y lanzaron gas para intentar prenderle fuego con habitantes en el interior.
— Pamela Cortes-Roemer (@PamelaCortes) March 9, 2021
También soy mujer y me siento amenazada por el rumbo que toman los acontecimientos. @SSC_CDMX
“También soy mujer y me siento amenazada por el rumbo que toman los acontecimientos”, agregó Pamela Cortés-Roemer, arrobando en cada uno de sus mensajes a la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México.
Las denuncias presentadas en contra de mi esposo han resultado sumamente dolorosas para mí. Deseo que cada una de estas sea analizada cuidadosamente por las autoridades y que con justicia se resuelvan en estricto apego a derecho.
“Sin embargo, pido con mucho respeto a quienes intentaron cometer este crimen desproporcionado que no transfieran su enojo a los seres humanos que habitan un hogar. No existe justificación para un ataque de tal magnitud, el cual pudo haber tenido consecuencias fatales”, aseguró la comentarista .
Ésta es la primera vez que Pamela se pronuncia acerca del caso de su esposo, contra el que ya hay 61 denuncias por violación, abuso y acoso sexual.
En tanto, el escritor cerró sus redes sociales, lo destituyeron como Embajador de Buena Voluntad por la UNESCO y al parecer, perdió su programa De cabeza en el canal ADN 40.