Rosalinda Bueso, esposa de Ebrard, brilla entre las Primeras Damas del mundo

Todo parecía indicar que ante la negativa del presidente Andrés Manuel López Obrador de asistir al foro del Grupo de los 20, México se quedaría sin representación; sin embargo, el canciller Marcelo Ebrard viajó a Japón, acompañado de su esposa, Rosalinda Bueso, para cumplir con el compromiso internacional.

Fue Bueso quien, literalmente, brilló en Kioto. La graduada en Administración de Empresas Turísticas y en Mercadotecnia y Ventas supo elegir el outfit para aparecer en la tradicional fotografía de El Club de las Primeras Damas y el Primer Caballero (Phillip May, esposo de Theresa May). Logró opacar incluso a Juliana Awada, Begoña Gómez y Brigitte Macron.

Rosalinda optó por un vestido midi amarillo canario, falda línea “A” y plisada en ruedo, escote ojo de cerradura, manga larga tipo globo, cintura acentuada. Su melena castaña suelta; en cuanto al maquillaje fue discreta, con resalte sólo en labios. Como accesorio utilizó unos pendientes y se calzó con unos stilettos.

Bueso tuvo un lugar protagónico al lado de Brigitte Macron, quien optó por un vestido ajustado con su color emblema: azul celeste; pero han sido las Primeras Damas de España y Argentina las que le dieron la batalla de estilismo a la hondureña —Bueso nació en Tegucigalpa—. Begoña Gómez fue nacionalista con su vestido midi camisero.

Firmado por Teresa Helbig para su colección primavera/verano 2016, el diseño en blanco roto, así como el estampado floral y de aves metalizado, con transparencia en hombros y falda plisada, le dio un acierto para el verano japonés. El único fail fue la elección de los zapatos de salón color gris, que le dio un toque formal innecesario. Otro look más que acertado fue el de Juliana Awada.

La esposa del premier argentino utilizó un midi amarillo, estampado floral en azul, escote en “V” ancha, manga francesa y falda plisada con abertura frontal. Maquillaje natural y sandalias marrones de tiras. En cuanto a Peng Liyuan, de China, eligió un vestido monocromo verde esmeralda, cuello Mao y engalanado de una flor bordada en un hombro.
Con agenda propia estas mujeres en el poder participaron en el acto de bienvenida en el Garden Oriental de Osaka, dieron un paseo en rikshaw —vehículo de dos ruedas a modo carruaje— y visitaron el puente Tsuten-kyo en el templo Tofuku-ji. Se trasladaron después a los jardines japoneses y disfrutaron de la tradicional ceremonia del té.

Durante el foro, Rosalinda lució otro acertado vestido del mismo estilo pero en color palo de rosa. En esta ocasión, optó por un peinado recogido y pointy heels nude, logrando así un elegante y sofisticado look.