Buscando vidas, el testimonio de bombero voluntario del 19S
Desde pequeño, Santiago siente una pasión por ayudar a la gente. Comenzó de pequeño en la Cruz Roja tomando cursos de rescate y posteriormente tomó clases de lleno para convertirse en bombero en Houston, con un año de teoría y otro de práctica. Al terminar, salió como voluntario y seis meses después se convirtió en squad. Al regresar a México se le presenta la oportunidad de entrar en Huixquilucan como voluntario. Durante el sismo de 2017 fungió como rescatista dentro del edificio derrumbado entre Torreón y Viaducto. Conoce al héroe Santiago Schietekat.
El inmueble tenía siete pisos con un espectacular encima. El protocolo comenzó buscando vida, voluntarios ayudaron a enlistar los nombres de las personas faltantes y posteriormente enfocaron esfuerzos hacia la parte del rescate. “Tuvimos que pedirle a la gente que se bajara de los escombros para trabajar en la parte de abajo lo más rápido posible, gracias a la marina y a los bomberos hicimos gran trabajo de equipo. Es súper peligroso que personas caminen arriba, pues se mueven lozas y rescatistas podríamos quedar atrapados”, contó Santiago Como herramienta clave, utilizaron tubos PVC, pues gracias a su flexibilidad lograron introducirlos entre los escombros y comunicarse con las personas vivas, midiendo así la distancia que había que recorrer para llegar a las víctimas. Además, el héroe insistió en que parte esencial del rescate consta en tener una buena organización, logrando así un trabajo exitoso.
En su caso, encontró a cinco personas vivas, lamentablemente la última falleció al tratar de ser rescatado. “Toño, es la historia conmovedora que me dejó huella. Tenía una viga en la sobre espalda y al momento de comenzar a trabajar para rescatarlo (dándole ánimos y manteniéndolo calmado), perdió la vida, su pulso desapareció al instante”, platicó Santiago. Además, encontró 11 cadáveres, mismos fueron reconocidos por sus familiares y posteriormente se entregaron al Ministerio Público. Para el jueves por la mañana, el edificio ya se encontraba completamente limpio.
A pesar del miedo e incertidumbre que llegamos a sentir en momentos de pánico, Santiago nos platicó que como rescatista tienes que hacer presentes tus cinco sentidos. “Hubo un punto cuando estuve abajo de los escombros en el que dejé de escuchar todo, yo sabía que si volvía a temblar ahí quedaba, necesitas tener una paz mental, sabes a lo que vas, tienes que pensar en cada movimiento. Creo que es importante estar tranquilo”. Además, insistió en que en momentos de emergencia es necesario dejar a un lado el pánico y esperar a personas preparadas, no intentar meternos entre los escombros.
“Fue impresionante ver como llegaban olas y olas de gente a aportar, entre grúas para cargar techos completos, comida, y palas que nos ayudaron a trabajar lo más rápido posible”, declaró Schietekat. Además, el rescatista afirmó haber aprendido durante el desastre natural el valor de un ser humano. “El objetivo que movió millones de mexicanos fue uno: las personas. Me quedo con lo que puede dar la gente por salvar a una persona”, confesó.