Kate Middleton, versátil al vestir en su séptimo día de gira por NZ

Kate y Guillermo cumplen una semana en su gira por Australia y Nueva Zelanda, y en esta ocasión, los duques viajaron a los poblados de Dunedin y Queenstown, en los que realizaron muchas y diferentes actividades, todas de fin de semana.

Este día, la guapa Kate Middleton sorprendió por usar cuatro outfits diferentes, cada uno adecuado para la ocasión. En su llegada a Dunedin, la pareja Real fue recibida por gente local y momentos más tarde hicieron su llegada a la catedral de St. Paul a la misa dominical que se ofreció por su visita y por el tradicional domingo de ramos.

Se vendieron entradas para el evento al interior de la catedral, no obstante, a los alrededores de la iglesia, los seguidores de la Familia Real británica se abarrotaron para saludar a los duques de Cambridge.

Para este evento oficial, Kate usó un vestido color turquesa de la diseñadora neozelandesa Emilia Wickstead, a juego con un sombrero de Jane Taylor. El vestido es el mismo, en diferente color que el que usó en la Fiesta de Jardín de la Reina Isabel en 2012.

Al terminar el acto eclesiástico, la pareja se dirigió al estadio de Forsyth Barr en el que presenciaron un torneo de Rippa Rugby, parecido al juego “toma de bandera” de fútbol americano, especial para mujeres y niños, ya que no está permitido el contacto entre los jugadores.

Cada uno de los royals apoyó a un equipo, aconsejándolos sobre jugadas e interactuando en todo momento con los pequeños, por lo que la pasaron de lo mejor. Para esta relajada actividad, Kate usó skinny jeans de Zara, a juego con un suéter de Jonathan Saunders y tenis de terciopelo gris.

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Fue un agitado pero disfrutable día para los duques, ya que al terminar el encuentro deportivo fueron llevados a una degustación de vinos en Queenstown en la región vinícola de Otago. Muy casual, la duquesa vistió nuevamente de skinny jeans, pero esta vez los combinó con una camisa a cuadros y un saco azul marino, del mismo color de sus alpargatas Stuart Weitzman.

Los neozelandeses son conocidos por su afición a los deportes extremos, por lo que el domingo de los royals cerró con una aventura de lanchas en el río Shotover. A pesar de ir a 80 km por hora, la mamá del príncipe George lució fenomenal. Se recogió el pelo en una cola de caballo y usó lentes de sol estilo wyfarer, igual que el príncipe Guillermo, quien usó una chamarra para cubrirse del agua.

El día de hoy se dieron a conocer rumores de un posible segundo embarazo de la pareja, no obstante, queda en duda, ya que en la desgustación de vinos, la duquesa probó una copa, acompañada de algunos bocadillos.

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