La historia de amor de Sarah y Andrés de York

La historia de Sarah Ferguson y el Duque de York ha sido toda una montaña rusa, comenzando con un gran romance, luego un divercio y ahora una amistosa -y cariñosa- relación. Desde este verano los duques han estado en los principales tabloides debido a los rumores de que Andrés y Sarah se habían reconciliado existiendo un rumor de unas segundas nupcias además de las recientes declaraciones de Sarah comentando que Andrés siempre será su príncipe.

Conforme han pasado los años, Sarah, quien hoy cumple 54 años, le ha dejado claro a los medios que su divorcio fue porque ella quería perseguir una carrera y no es bien visto que una royal trabaje. Hace aproximadamente 17 años el matrimonio York, conformado por Sarah y Andrés terminó con un divorcio, al parecer por la vida que llevaba el Príncipe y no porque hubiera alguien más.

Ellos se conocieron desde pequeños pero se empezaron a frecuentar de mayores. El 17 de marzo de 1986 hicieron público su compromiso y él mismo diseño el anillo que le dio a Sarah. Decidieron casarse en julio de 1986 en la Abadía de Westminster (mismo lugar donde se casaron los Duques de Cambridge). El día de su boda la Reina le dio a su hijo Andrés el título de Duque de York, y así fue como Sarah obtuvo el título de Duquesa de York.

Después de unos años de casados y llevar una vida dentro de la familia real nace su primogénita, Beatriz, el 8 de agosto de 1988. Inspirada en su vida como madre decidió laznar su primer libro para niños. Más tarde este libro se volvió un programa de televisión. Dos años después, el 23 de marzo de 1990 nació su segunda hija, la Princesa Eugenia.

Durante estos primeros años de matrimonio y de vida como madre, Sarah aumentó de peso, mientras tanto, Andrés estaba fuera en la marina y deberes reales. Esto poco a poco hizo que se fueran distanciando y que Sarah fuera relacionada con otros hombres, entre ellos un multimillonario, Steve Wyatt. Se dice que ésta fue una de las razones principales por las cuales decidieron anunciar su separación el 19 de marzo de 1992.

En ese mismo año se publicaron fotos comprometedoras de la Duquesa succionando los dedos de los pies de su asesor financiero, John Bryan. En 1993, crea su fundación Niños en Crisis y cuatro años después de separarse de Andrés, el 30 de mayo de 1996 se divorcio. Con este divorcio ella perdió el título de Su Alteza Real, pero pudo conservar el título de Duquesa de York.

Después del divorcio Sarah se mudó a Estados Unidos y decidió trabajar para poder pagar sus deudas y empezar una carrera profesional. Desde ahí, Sarah todavía asiste a algunas funciones con sus hijas, como la investidura del Duque de York en la Orden Victoriana, en el que las ocasiones que se le concede la cortesía de tratamiento como miembro de la Familia Real.

En 2009 el Príncipe comentó sobre su relación con Sarah que: “¿Acaso tenemos que estar casados? Bueno, vamos a decirlo de otra manera, no puedo ni confirmar ni negar la posibilidad. Tenemos dos grandes niñas y ambos nos ocupamos de ellas." En 2010 surge el escándalo de que Sarah quiere vender a un supuesto empresario acceso al Príncipe Andrés y que ella puede conseguirle lo que quiera de él. Debido a esto fue miembro non grato de la familia real por mucho tiempo y mientras tanto fue miembro permanente de diferentes talk shows y programas mañaneros para contar la situación en la que se encontraba actualmente, depresión y alcohol.

En 1997 se convierte en portavoz de Weight Watchers después de que la prensa británica la había nombrado la “Duquesa de Pork”. Con este programa ella buscaba bajar su peso y hacer que otras mujeres lo lograran además de que recibía un gran cheque. Después dejó un poco la vida pública aunque se le veía en ocasiones con sus hijas y a veces con su ex esposo Andrés en eventos privados. En 2006 creó su propia fundación, Sarah Ferguson.

El duque ha sido relacionado con una serie de mujeres en los últimos años, pero ninguna de las relaciones ha perdurado. Las relaciones de Fergie también han fallado y por lo tanto todo vuelve a la relación entre ellos dos. Sarah hace un recuento de su vida con Andrés y comenta que su relación fue una historia de amor y que tiene un final feliz.

Las últimas declaraciones fueron por parte de Sarah Ferguson en la presentación de su último libro para niños en el Festival de Literatura, donde se refirió a su boda como un evento muy bonito con un príncipe "muy guapo y de verdad". Actualmente, la duquesa sigue viviendo en los mismos terrenos del Royal Lodge, antigua casa de campo de la reina madre, con el duque de York aún después de su divorcio hace 17 años. Todavía se cuestiona si en efecto se volverán a casar.