Salma Hayek confiesa cuál es el mayor éxito en su vida

Aunque sigue siendo uno de los rostros más reconocidosde la meca del cine, a sus 49 años la actriz Salma Hayek tiene muy claro que, a la hora de valorar las experiencias más gratificantes de su existencia, la idílica vida que comparte junto al empresario François-Henri Pinault y su hija Valentina, de ocho años,supera con creces cualquiera de los éxitos cinematográficos de su dilatada trayectoria profesional.

"Un matrimonio lleno de amor y cariño, ese es sin duda el logro más importante de mi vida. Mi casa es donde se encuentra mi marido, él es mi casa. Todo lo que está fuera de mi núcleo familiar es una aventura que emprendo siempre con la mente puesta en cómo puede afectar a los míos", aseguró a la revista Red.

Por otro lado, la estrella de Hollywood no duda en reprobar la actitud de ciertos padres que -quizá debido al cansancio o el exceso de responsabilidades-, prefieren mantener a sus pequeños hipnotizados ante una pantalla en lugar de animarlos a jugar en la calle y a sacar el máximo provecho a la "vida real".

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"Tenemos que arrastrar a los niños a que participen activamente en la vida real. Entiendo que algunas madres y padres están muy cansados porque, en general, tienen que compaginar el trabajo con el cuidado de su familia, pero hay que hacer el esfuerzo y sacrificarse un poco más. En la actualidad, es mucho más sencillo entretener a los niños con una pantalla y evitar así tener que llevarles de un lado para otro, pero corremos el riesgo de aislarlos de la realidad. La conexión humana es imprescindible", indicó.

Pese a que sus primeros papeles en la gran pantalla se han visto irremediablemente asociados a su innegable atractivo físico, en la actualidad Salma Hayek prefiere usar su fama y exposición mediática para transmitir un mensaje que motive a las jóvenes a sentirse "únicas", así como dueñas absolutas de las decisiones que toman.

"Lo más importante que tengo que decirles a las chicas jóvenes es que no traten de ser como las demás, sino que estén orgullosas de aquello que las hace únicas. La clave no está en tratar a toda costa de encajar dentro de un grupo, sino en saber qué podemos aportar a la sociedad y tener claro que las diferencias enriquecen", apuntó.