Google da las "¡gracias totales!" a Cerati con un ‘doodle’
Con una portada de música ligera, Google despertó este martes con un ‘doodle' dedicado al músico, compositor y productor argentino Gustavo Cerati, quien nació hace 56 años y cuyas circunstancias que lo llevaron a su muerte recién comienzan a conocerse.
Doce países de América Latina, además de Bulgaria y Corea del Sur, tienen el garabato del joven Cerati con su guitarra, dando las "¡gracias totales!" con las que el músico -nacido en Buenos Aires el 11 de agosto de 1959- arrancaba ovaciones.
Hace casi un año, el 4 de septiembre, el cantautor murió luego de cuatro años de permanecer en coma por un accidente cerebrovascular (ACV) que le ocurrió luego de un concierto en Caracas, Venezuela.
El domingo, el diario argentino Clarín publicó un adelanto exclusivo sobre la nueva biografía de Cerati que será publicada esta semana, bajo la autoría del periodista Juan Morris y que en un fragmento relata la cadena de sucesos previos al ACV que sufrió el cantante.
Relata que tras el concierto en Caracas en 2010, Cerati se reuniría con el sonidista Adrián Taverna -como siempre lo hacían tras un concierto- en un camerino, pero luego de demorarse más de lo normal, el cantante apareció "pálido, con los ojos desorbitados".
Cerati no pudo pronunciar palabra y se fue de la habitación. Después fue hallado en otra "tirado en el sillón, con el saco a un costado, la camisa desabrochada y la boca entreabierta", retoma Clarín de la biografía por estrenarse.
Los allegados a Cerati buscaron un médico, y tras varios contratiempos lo llevaron a un hospital que no tenía electricidad. Tuvieron que llevarlo a otra clínica, y de regreso al hospital cuando volvió la energía. Nadie le había dado un diagnóstico en todo ese tiempo.
El cantante amaneció con parte del cuerpo inmóvil y apenas se podía comunicar, aunque podía moverse con ayuda. Llegó la segunda noche y a la mañana siguiente, el cantante fue encontrado "sacudiéndose y agarrándose la cabeza con su brazo izquierdo".
Casi en todo momento estuvo Taverna con él, y fue quien lo cargó para llevarlo a hacerle una tomografía, pues la camilla no pasaba por la puerta del hospital venezolano. "Tenía la mirada perdida y la boca entreabierta", relata Clarín.
El ACV le había provocado una gran inflamación del cerebro y tenía que ser operado con urgencia, finaliza el fragmento de la biografía.