"¿Será que me quedo a vivir en Europa?" Por: Bárbara Coppel

Desde hace varias semanas hemos sido testigos a través de sus redes sociales de lo bien que la ha pasado Bárbara Coppel en su último "getaway trip". Sin embargo, nadie -ni ella misma- sospechaba que éste podía ser un viaje que cambiaría su vida.

A través de una narración en voz de la propia Bárbara en exclusiva para Quién® nos enteramos de todo lo que ha hecho durante su viaje. Después de leer, cualquiera entendería por qué está comenzado a plantearse la posibilidad de mudarse por un periodo de tiempo indefinido a esta parte del mundo. Aquí, su historia:

La idea del viaje era acompañar a mi amiga Sonia Falcone (pintora y artista plástica de origen boliviano) a la exposición de su obra en la Biennale de Venecia y a recibir el premio de La Mujer del Año al que estuvo nominada en Mónaco y regresar a casa.

Todo fue de ensueño, llegamos a su casa en Londres donde pasamos unos días con su familia entre eventos de arte, cocteles que ofrecía en su casa, comidas y cenas en los lugares it de Londres, shopping, en fin, Sonia es una mujer llena de vida y todo el tiempo está creando, trabajando, ayudando, dando... es un gran ser humano y una gran amiga mía, la quiero y la respeto muchísimo.

Nos fuimos a Venecia y desde que llegamos todo estuvo de impacto. Sonia hospedó a sus invitados en el Hotel Danieli, una joya veneciana, mi cuarto era el de una princesa, literal con vista a las góndolas. No sabía si salir o no del cuarto.

Desde que llegamos a Venecia en mi mente estaba dormir un poco porque si algo no hemos hecho es descansar, todo el tiempo on the move... pero fue imposible. Entre la euforia de conocer a tanta gente tan interesante, la ciudad a todo lo que da por la Biennale... eventos todos los días. Sonia ofreció eventos cuatro días seguidos, el primero en la terraza del Hotel Danieli donde estaba su familia que vino de Bolivia, Phoenix y Estrasburgo a apoyarla. Amigos cercanos de todo el mundo, como Nuria Carte, Magdalena Gabriel, Christina Estrada, Susan y Will Hoskins, entre otros, lograron que inmediatamente se formara un grupo inseparable y muy grande.

Al evento le siguió un lunch en Cipriani's, cena en Hotel Principe donde empezaron los festejos formales en la víspera de la exposición de Sonia, fue entonces que conviví con el príncipe Edouard de Ligne y su bellísima y simpática esposa, la princesa Isabella Orsini de Ligne, gente muy educada y muy amable, desde el día uno hubo conexión y han sido muy lindos conmigo, hasta su casa en París nos ofrecen y me da risa que hasta a la piñata de sus hijas fuimos, en fin, una experiencia diferente a las que siempre había tenido y me encanta estarla viviendo porque todavía no me voy, ni tengo vuelo de regreso. Me iba a quedar como 10 días originalmente y ya llevo casi un mes... es que es imposible irse cuando las cosas fluyen, las amistades se afianzan y las experiencias nuevas te absorben de la manera más positiva.

El día de la exposición de Sonia en la Biennale tuvo lugar una cena en el Hotel Monaco, espectacular, en un salón divino donde se juntó todo mundo para felicitarla.

Después de Mónaco del evento de La Mujer del Año (donde coincidí con Pierre Casiraghi y Jude Law), nos fuimos de regreso a Londres donde seguimos en el art mode. Siguió el Festival de Cannes que no tenía previsto, pero una cosa lleva a la otra, coincidí con Kate del Castillo y Olguita Segura, una grata sorpresa.

Los festejos nos paraban día y noche, un ambiente muy distinto y muy cool, disfruté cada instante, vi a varias celebridades que pasaban por montones en el hotel donde estaba, mi favorito es el Hôtel du Cap-Eden Roc, los mejores bellinis del mundo. Un amigo francés que es productor de cine me invitó a la premiere de Inside Out y me gustó mucho toda la experiencia. De Cannes siguió París, estoy considerando vivir aquí por cierto... O por lo menos tener un pied à terre aquí, es mi ciudad favorita del mundo.

De Paris surgió el Grand Prix de Mónaco y la invitación de Stephen Hung y Deborah Hung (mexicana) a la presentación de su próximo hotel en Macau, Louis XIII. Hasta felicité al príncipe Alberto de Mónaco por tan hermoso "reino". Las carreras me fascinaron, no es algo que tenía en mi bucket list, pero qué mejor que haberlo vivido. El Hotel Metropole, el de mejor ambiente, la vez pasada me había hospedado en Hotel Hermitage, divino también, pero el Metropole era el it place, las carreras estaban prácticamente en la terraza.

Después, otra vez París donde estoy actualmente, con varios eventos sobretodo de arte contemporáneo. Estoy feliz de estar expuesta a este mundo y de la mano de Sonia que es lo máximo. Esta semana he ido a Roland Garros y la que sigue a España e Italia... ¿Será que me quedo a vivir en Europa?