Justin Bieber quiere invertir en una fábrica de coches
Justin tiene una amplia flota de vehículos, pero su favorito es el modelo Fisker Karma --un coche eléctrico que le regaló su mánager Scooter Braun por su 18 cumpleaños--, por eso, se preocupó mucho cuando llegó a sus oídos que los fabricantes de la casa automovilística estaban pasando por dificultades financieras, por lo que estaría considerando involucrarse e invertir en la compañía, especialmente ahora que estaban planeando sacar un nuevo modelo con el que ha quedado prendado.
"Justin está preocupado pensando que no será capaz de arreglar su Fisker si cierran la fábrica y sobre todo, quería conseguir el próximo modelo de la marca, un modelo que se parecerá mucho al Batimóvil. Le ha pedido a sus empleados que le mantengan informado del estado de la empresa porque quiere ayudarles, aunque su equipo no quiere que se ponga a invertir de forma inconsciente", explicó una fuente cercana al artista al periódico The Sun.
El verano pasado, la policía paró al cantante canadiense en una autopista cercana a la casa donde reside, en Calabasas (California) y le pusieron una multa por conducir a 160 kilómetros por hora con su Fisker Karma.
El modelo Fisker Karma es un deportivo híbrido fabricado en Finlandia y cuyo precio asciende a los 100 mil dólares. El ostentoso vehículo puede alcanzar velocidades de hasta 200 kilómetros por hora, pasando de cero a 100 en 6.3 segundos.
En 2011, Justin se dio un capricho con un Range Rover personalizado, valorado en 155 mil dólares, equipado con un equipo de sonido de 80.000 dólares, tapicería de cuero y un exclusivo motor Cosworth.
Tal es su pasión por los coches inusuales, y en especial por el estilo Batmóvil, que ya ha remodelado un Cadillac y un Ferrari para que se asemejen al vehículo del famoso héroe de cómic.
cd