Angélica Rivera con un estilo versátil en su visita a Japón

Los emperadores de Japón, su Majestad Akihito y a la Emperatriz Michiko recibieron ayer en el Palacio Imperial al Presidente Enrique Peña Nieto y a su esposa Angélica Rivera, durante el cuarto día de su gira por Asia.

Para la ocasión la pareja presidencial optó por lucir conservadora y clásica. Así nuevamente Enrique Peña Nieto apostó por su ya característica corbata roja y un traje negro, mientras que la primera dama usó un conjunto azul rey con aplicaciones de encaje, conformado por un top de manga larga con detalle de lazo a la cintura y falda a la rodilla.

Para complementar, Angélica se valió de un clutch Bottega Veneta y unos tacones cerrados en color negro. Los cuales correspondieron correctamente según el protocolo político. “Me parece que es un look muy conservador para su edad y no destaca favorablemente su figura….¡me encanta el clutch!”, comenta Claudia Cándano, editora de moda de la revista InStyle.

En la reunión se habló mayores intercambios en áreas como turismo, tecnologías de la información, automotriz, autopartes y energía. Luego se ofreció un almuerzo en honor al mandatario mexicano y la primera dama, quienes también fueron acompañados por el Canciller y los Secretarios de Economía y Turismo.

Más tarde Shinzo Abe, Primer Ministro de Japón y la su esposa Abe ofrecieron una cena, para la que Angélica Rivera dio un radical pero sencillo y práctico giro a su look. Así por primera vez con el pelo recogido en un chongo y un vestido que mostró formas geométricas, microestampados de flores y motivos paisley, la Gaviota lució muy moderna y sofisticada.

“Me parece mejor este look, se ve joven y resalta a manera favorecedora su silueta”, dice la experta en moda Claudia Cándano, que a su vez recalcó como acierto su peinado recogido. En cuanto accesorios la primera dama balanceó asertivamente con pocas piezas; unos pequeños aretes de perlas, unos zapatos negros y una bolsa de sobre del mismo color.

En la visita también se confirmó la invitación al Emperador Akihito y a la Emperatriz Michiko, a visitar México en enero del 2014, a fin de conmemorar los 400 años del primer contacto entre México y el país asiático.