Las 7 cosas que debes saber de Valentina Paloma, hija de Salma Hayek

1. Habla tres idiomas y es traductora de su mamá

La conocida actriz mexicana lleva varios años residiendo en Francia, sin embargo la pequeña Valentina no solo habla francés mucho mejor que su famosa madre, sino que suele traducirla cuando la actriz necesita expresarse en público en un idioma que no consigue dominar.

"Ahora llevo ya cinco años en París, y todavía no puedo hablar francés. Es bastante humillante. (Valentina) no sólo tiene que traducírmelo todo, sino que incluso ha desarrollado un talento para imitar acentos, y suele imitar mi acento y el de mi marido en inglés, que están muy marcados por nuestras lenguas maternas. Y como ella no tiene ningún acento al hablar inglés, siempre se ríe de nosotros. Ella puede imitarme a mí intentando hablar inglés e intentando hablar francés. ¡Ella puede con cualquier acento y yo no puedo ni hablar el idioma!", declaró Salma a una revista británica.

La verdad es que desde que tenía dos años, Valentina podía expresarse con fluidez en inglés, español y Francés.

2. Es una niña muy detallista

Aunque Salma odia estar separada de su hija, cuando sus compromisos le obligan a moverse por el mundo, la niña se encarga personalmente de introducir un recuerdo personal en el equipaje para que su madre piense en ella durante su estancia lejos del hogar. El obsequio no solo ayuda a Salma a sentirse cerca de su pequeña cuando está fuera, sino que también constituye una agradable sorpresa cuando la artista encuentra el detalle accidentalmente en su maleta.

"Cada vez que salgo fuera, mi hija Valentina cuela en mi maleta un recuerdo de ella que siempre me sorprende, porque nunca repite regalo en cada uno de los viajes.

Lo mete en el equipaje sin que yo me dé cuenta, por lo que siempre me agrada encontrarme con algo que no me espero cuando tengo que pasar por la tediosa labor de deshacer el equipaje", reveló la actriz a la revista US Weekly.

3. Es tranquila y respetuosa de los demás

Salma trata de evitar a toda costa que su hija herede sus malos hábitos y por ello es muy estricta, sin embargo, reconoce que Valentina es una niña tranquila y respetuosa.

"Es gracioso, la verdad, porque ella es una niña bastante más tranquila que yo, y seguramente esto tenga que ver con el hecho de que le he inculcado un gran respeto por los demás. Soy inflexible en eso, lo que no significa que no me guste divertirme con mi hija y dejar que se exprese libremente. Nos encanta hablar de cosas de chicas, jugar juntas e incluso bromear entre nosotras, pero también pongo límites. Hay que saber encontrar el equilibrio a la hora de educar", explicó. Y es que la actriz mexicana no pasó precisamente desapercibida durante sus años en un colegio católico en Luisiana, donde sacaba de quicio a sus profesores con sus ocurrencias y sus bromas pesadas.

4. Es muy divertida

Hace unos meses supimos por diversas fuentes que Valentina orilló a sus papás a subirse a la mesa de un restaurante en Las Vegas, luego de una divertida comida.

Se dice que entre la familia había tal ambiente festivo que todos terminaron bailando sobre la mesa ante la mirada atónita del resto de comensales.

"Se les veía muy contentos, disfrutando de la compañía y de la cuantiosa comida que habían pedido, como rollitos de primavera, cangrejo y un surtido variado de sushi entre otras cosas. La situación era tan amigable que no dudaron en ponerse todos a bailar con Valentina después de comer", contó un testigo a la revista People.

5. Es graciosa y muy ocurrente

La pequeña es sin duda su mayor fuente de energía para Salma, sobre todo después de una semana muy cargada de trabajo, así lo expresó la propia Salma a la revista "InStyle" hace casi un año:

"Después de haber pasado una semana intensa de trabajo, y de haber volado a Los Ángeles desde París la noche anterior, Valentina fue a mi habitación, saltó sobre mi cama y me abrazó, y me dijo: '¿Qué estás haciendo? A mí por supuesto me asustó su sorpresivo salto.

"Y ella comenzó a reírse y me dijo: necesitas desesperadamente mucha de mi energía. Yo estaba tan sorprendida de lo que ella me había dicho, pues sólo tiene ¡4 años de edad!", compartió Hayek a la publicación.

"Mi hija compone sus propias canciones y rimas, por eso ella siempre me hace reír", compartió Hayek.

6. Le encanta viajar

Para muchos padres famosos es difícil empatar sus tiempos de trabajo con los de sus pequeños, sin embargo, Salma se dice afortunada en ese sentido:

"Tenemos suerte porque le encanta viajar. Ella estuvo estudiando en una escuela en España porque allí estuve haciendo una película, y se encuentra muy entusiasmada con esta nueva experiencia, de conocer a otros niños y los maestros. Ella se siente muy bien, no tiene ningún tipo de ansiedad o tristeza", dijo Salma.

Después de pasar sus días entre sus responsabilidades como esposa, madre, actriz y empresaria, Hayek asegura que disfruta de sus momentos libres en las noches al leerle los libros del Dr. Seuss a Valentina.

7. Es una niña consciente de los problemas sociales

En un evento reciente en contra de la violencia hacia la mujer, la actriz y empresaria veracruzana explicó que Valentina Paloma es una niña que, apesar de tener solo 5 años, tiene claras las consecuencias de la desigualdad entre los hombres y las mujeres:

"Soy bastante cuidadosa a la hora de explicarle con detalle las repercusiones de un problema como el de la violencia doméstica, pero mi hija sabe de sobra que su madre trabaja mucho para promover la justicia social y elevar la figura de la mujer. Desde que era muy pequeña, mi marido y yo hemos tratado de inculcarle estos valores y ella es consciente de que los derechos y libertades de la mujer no siempre son respetados", aseguró la estrella de cine a la revista People.

Además Salma transmite a su pequeña la necesidad de trabajar por la igualdad entre hombres y mujeres, Salma se asegura de que Valentina entienda la importancia de la hermandad femenina a través de su relación cotidiana.

"Una de las lecciones que siempre intento enseñarle es que las mujeres debemos permanecer juntas y defender nuestros derechos como comunidad".

Pero eso no es todo, Valentina también aboga por los derechos de los animales, pues desde que conoció al activista Jane Goodall, Salma tiene que soportar que su hija de cinco años le recuerde que podría hacer un mejor uso de sus finanzas, ya que compara los precios de todas las cosas con el dinero que podría salvar a algún chimpancé, lo que solo consigue que la actriz se sienta culpable de sus caprichos.

"Ha desarrollado una especie de medida para ahorrar dinero relacionada con los chimpancés, en la que no quiere que derrochemos ni que nos deshagamos de nada porque dice que con el dinero que cuestan las cosas podríamos salvar a algún chimpancé. Si compro un bolso, por ejemplo, me pregunta: '¿Cuántos chimpancés crees que podríamos salvar con el dinero que te has gastado en ese bolso?' La verdad es que es aterrador", aseguró.