En privado, dan adiós a Carlos Fuentes

La sorpresiva muerte del "mexicano más universal", Carlos Fuentes, movilizó a la elite cultural y política del país, y para que los más cercanos a la vida del escritor pudieran despedirlo, su viuda, la periodista Silvia Lemus, decidió hacerlo en la intimidad de su hogar, en el número 15 de la Calle del Apóstol Santiago, en San Jerónimo Lídice.

"La muerte es un instante sin fin", escribió en su diccionario personal "En esto creo", el considerado por muchos "La Voz de México", y ya emprendió ese viaje, pero como él mismo lo imprimió en "La edad del tiempo", hoy, "los libros no dan la inmortalidad; son la inmortalidad, aunque nadie los lea, aunque los tiren a la basura o los quemen".

Hasta la casa del escritor, hermano, amigo e, incluso, crítico, según fuera el caso, poco a poco llegaron todos aquellos a los que lo intempestivo de su fallecimiento no pudo más que dejar sorpresa y dolor. Una de sus amigas más cercanas, Pilar del Río, expresó la magia con la que el autor de "La región más transparente" tocaba a aquéllos que lo trataron.

"Para el mundo de la literatura, del pensamiento, de la ciudadanía, de la intervención, de la inteligencia y la cultura, es decir es una gran pérdida para el mundo. Silvia está en estos momentos destrozada, pero muy consiente de que una persona muy querida ha muerto y una persona absolutamente imprescindible. Él hizo mexicano a mi marido, José Saramago era mexicano, por Carlos Fuentes", señaló Del Río.

La partida del uno de los máximos exponentes de la narrativa mexicana, no fue pasada por alto por ningún sector de la vida del país, por lo que el primer mandatario de la nación, Felipe Calderón, quiso dar su respeto a la familia de Fuentes, y caminando, como todos, debido a la estreches de la calle en la que está situado el domicilio, llegó para reconocer la grandeza de aquel que se inspiró siempre en la lectura de "Al filo del agua", de Agustín Yáñez.

"Lamento muy profundamente la muerte de Carlos Fuentes, un mexicano excepcional y universal, uno de los más grandes en nuestro tiempo. Estoy seguro que su obra va a perdurar en muchas generaciones, el señor Carlos Fuentes y su obra, son ya parte de México de nuestra identidad y fue un escritor, un relator de lo que somos, de nuestras aflicciones, alegrías y de nuestra realidad y me parece muy penosa esta inesperada partida.

"Será muy grande el hueco que deje Carlos Fuentes en México y en la literatura universal. Fue un hombre de su tiempo, responsable con México y es responsabilidad la cumplió precisamente opinando, apoyando o criticando siempre con la objetividad de tener en un espíritu vivo, apasionado pero a la vez sobrio e informado (...) Esta muerte inesperada nos llena de luto y tristeza a todos los mexicano", agregó Calderón.

Para el jefe de gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, la despedida tuvo un carácter más personal, y adelantó que su mandato le rendirá un especial tributo al escritor: "Hace un tiempo platiqué con Carlos sobre la posibilidad de que su imagen siempre fuera parte de la Ciudad de México, por eso le propuse que un tren de la nueva línea 12 llevara su nombre, y me dijo que sí, así que seguramente esto se llevará a cabo", dijo.

Por su parte, la presidenta del Conaculta, Consuelo Sáizar, adelantó que habrá más celebraciones de la vida de Fuentes.

"No olvidemos que ‘La Muerte de Artemio Cruz' y ‘Aura' cumplen 50 años de haber sido publicados, nosotros estábamos planeando una serie de eventos para festejar por todo lo alto estas dos celebraciones que coincidían, en 1962 es cuando se publican estos dos libros importantísimos, así que lo hable con Vicente Rojo y vamos a continuar adelante con estas celebraciones de estos dos títulos cumbres y capitales de la literatura mexicana y de la patria de la Ñ", señaló Sáizar.

Pero hay Fuentes para rato, así lo dio a conocer Marcela González Duran, directora de Editorial Alfaguara, y persona cercana a los textos del escritor, pues hay dos libros de Fuentes listos para publicarse en los próximos meses: "El primero se llama ‘Personas' y se publicará en junio, éste es un libro de ensayos sobre personajes que Fuentes conoció, y está hecho a manera de contar su vida. El otro es una novela formal que se llama ‘Federico en su Balcón' y estaba previsto salir en noviembre para la FIL de Guadalajara".

También dejó varios pendiente, según confirmó y compañero de múltiples aventuras, Federico Reyes-Heroles, pues preparaba la edición de sus memorias "Los días de la vida" y estaba comenzando la investigación para una novela más que se llamaría "El baile del Centenario": "Me dijo ‘es difícil trabajar en ciudad de México, porque me interrumpen mucho, pero estoy leyendo mucho y no me puedo llevar mis libros', este libro iba a retratar el periodo de 1910 a 1920", compartió.

Entre los escritores que asistieron esta noche a la despedida privada estuvieron Gonzalo Celorio, Xavier Velasco, Hernán Lara Zavala, Cristina Pacheco, Ramón Xirau, Elena Poniatowska, Ángeles Mastreta, Héctor Aguilar Camín e Ignacio Solares.

Cercanas las 22:00 horas, hicieron presencia el ex Rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, así como el candidato a la gubernatura del DF, Miguel Ángel Mancera, y el filántropo Manuel Arango.