Alexander Acha aclamado en concierto de su papá
Ante los impacientes espectadores las luces se apagaron a las 21:20 horas en el Auditorio Telmex, para luego iluminarse el escenario, así como cinco gigantes pantallas que proyectaron de entrada escenas de la trayectoria del cantante, como cuando participó en el Festival OTI. Emmanuel hizo su aparición en una rampa iluminada tipo ochentera, que también mostró imágenes durante el concierto, mientras que a los costados estuvieron los 10 músicos y tres coristas. El primer corte de la velada fue "Tengo", para continuar con un mega "mix" "No he podido verte" y "Bella señora", temas con los que logró conectarse con el público hasta el último segundo de su presentación. Emmanuel, vestido de negro con un saco que emitía destellos de luz dorada, saludó a su público al que agradeció el hecho de dejarlo entrar a sus corazones: "Yo canto y a la vez aviento el alma, también me quedo un ratito en sus corazones y eso no hay con qué pagarlo". El cantautor continuó con "Qué será?", "Hay que arrimar el alma", "Quiero dormir cansado", "Detenerla ya", "Sentirme vivo", "Este terco corazón" y "Tengo mucho que aprender de ti", que fue el más coreado por todos los asistentes. Para ese momento del concierto la gente le pedía "Acha, Acha, Acha", solicitando la presencia de su hijo Alexander, quien ingresó al escenario y tras un caluroso abrazo a su padre se sentó frente a un piano para cantar a dúo con Emmanuel el tema "Solo". Alexander Acha interpretó la canción "Por la ciudad", que dijo la incluiría en su próxima producción discográfica, así como "Te amo", para despedirse diciendo al público: "Muchas gracias, que sigan disfrutando a mi padre". Emmanuel ingresó al escenario luciendo otro vestuario, el tercero de la noche, para deleitar con la canción "La vida caminaba sola", "Chica de humo", "Toda la vida" y "La séptima Luna". El cantautor se despidió con este último tema, en el que las pantallas del escenario mostraron una gigantesca Luna. Emmanuel subió a la rampa y llegó un momento en el que se vio su silueta en medio del astro y con la mano en alto diciendo adiós a sus fans, efecto muy bien logrado. Sin embargo, ante el clásico "otra, otra, otra!", salió de nuevo para interpretar un popurrí de temas que eran cantados por todo el auditorio conformado por más de siete mil personas. Al concluir volvió a despedirse. Ante la insistencia de que regresara, Emmanuel irrumpió con el sonido de las batucadas, que aunado a los coros estalló el júbilo de los presentes por la interpretación de "Corazón melao", con la que el cantante cerró con broche de oro su emotivo espectáculo.