Diego Luna recibe visita familiar en el set

Camila, de 23 años, y su pequeño hijo Jerónimo llegaron de visita a los estudios Churubusco de la ciudad de México para visitar a su querido Diego, de 29, quien últimamente pasa ahí buena parte del día dirigiendo Abel, su nueva película. El actor no para en compromisos, pues además está promoviendo la cinta Sólo quiero caminar.

Abel, la cual relata la historia de un niño que es abandonado por su padre y de cómo logra sobrevivir,es la segunda cinta que dirigirá Diego, misma que será producida por Canana Films, de la cual es dueño junto con Gael Garcia Bernal y Pablo Cruz. La película contará con un presupuesto de 2 millones 730 mil dólares, tendrá incentivos federales y presupuesto privado, incluidos 780 mil dólares en efectivo, aportado por el estado mexicano de Aguascalientes, que además proveerá un extra de 370 mil dólares en servicios adicionales.

Su amigo, José María Yazpik, forma parte del elenco y tuvo que subir 15 kilos para su papel en este drama familiar. "Lo primero que le pedí fue engordar y lo cumplió al pie de la letra, es un tipo generoso; me daba miedo trabajar con él por la relación tan cercana, pero estar rodando con alguien que quieres y conoces es bien importante", comentó Diego a los medios en una de las locaciones.

Fue hace unos días cuando el equipo de producción grabó algunas de las escenas en Aguascalientes, locación que fue elegida debido a que Diego y el escritor de la historia, Augusto Mendoza, pasaron mucho tiempo de su niñez en este lugar.

"Me puse a escribir la historia junto con Augusto Mendoza y descubrimos que los dos habíamos pasado nuestra niñez acá. Decidimos hablar de esos niños, de recuerdos y es más fácil escribir sobre un lugar que conoces y quieres; aquí tengo muchas relaciones", comentó el actor.

Luna aseguró estar preparado para recibir críticas de la película Abel y adelantó que por el momento desempeñará su rol de director, pero aseguró que no dejará la actuación de lado.