Los orígenes de Bernardo de la Garza
En su infancia, Bernardo de la Garza Herrera vivía en el número 18 de la calle de Cuautla, en la Condesa, con sus papás María Angélica Herrera Núñez y Carlos de la Garza Mijares, y sus dos hermanos, Juan Carlos â??mejor conocido como Sasi, un año y medio mayor que élâ?? y Andrea.Bernardo fue educado en la tradición religiosa. Primero en la orden cristiana de los Oblatos en el Colegio Vista Hermosa, de donde fue â??invitado a salirâ? porque â??tuve muchas faltas ese año y ya no dejaron que me reinscribieraâ?, y luego en el Instituto Cumbres, donde cursó la prepa. â??Ese cambio fue algo muy bieno en mi vida â??señalaâ??, pues me sirvió convivir con los Legionarios de Cristo para sentar cabeza.â?Su papá, un contador público del Tec de Monterrey, se dedicaba a su empresa de autopartes (dos años después, de 2003 a 2004, fue director Corporativo de Administración de Pemex), mientras que su esposa Marigel (como le llaman de cariño) dividía su tiempo entre el hogar y el traslado de sus hijos a las clases de karate y pintura, pero, sobre todo, a los entrenamientos de futbol de Bernardo, quien siempre formó parte de la selección de la escuela en la que estuviera.Los domingos la familia asistía a misa y algunas veces a La Marquesa a montar a caballo. De la Garza recuerda con cariño cuando su abuelo, José Herrera Olvera, quien fue dipitado federal por Tamaulipas en los 50 y luego secretario particular del gobernador Horacio Terán, â??nos llevaba a mi hermano y a mí al Hipódromo de las Américas y al Estadio Aztecaâ?.Llegaron los 80 y con ellos la desición de Bernardo de irse a estudiar a Monterrey Contaduría Pública en el Tec, al igual que su padre. Ese tiempo lejos de los suyos le sirvió para madurar.De regreso al DF, conoció a una guapa diseñadora gráfica de la Universidad Anáhuac del Sur, de quien se enamoró a primera vista y con quien contrajo nupcias: Ana María Vázquez Oâ??Farril. Hoy llevan 10 años de casados y dos hijos: Bernardo, de seis años de edad, y la preciosa Daniela, de tres.Pero antes de su boda, a mediados de los 90, luego de hacer una maestría en Administración en The Anderson School en la Universidad de California, Bernardo regresó a México y el presidente del Partido Verde Ecologista de México Jorge Emilio González Martínez, a quien Bernardo conoció en el Instituto Cumbres, lo invitó a participar en su proyecto político.